Ya hay anuncio: el color Pantone 2018 es Ultra Violet 18-3838, un tono que estará presente en moda, decoración, textiles y allí donde esta marca impregna su sello desde hace años.

Foto© Pantone prensa

Foto © Pantone prensa
«Vivimos en un momento en que se necesita inventiva e imaginación. Es este tipo de creatividad e inspiración la que da origen al color Pantone ultravioleta, 18-3838, un púrpura con base azul que lleva nuestra conciencia y potencial a un nivel más alto. Desde la exploración de nuevas tecnologías y una galaxia cada vez más grande a la expresión artística y una reflexión espiritual, el intuitivo Ultra violeta ilumina el camino de lo que está por venir», es la reflexión de Leatrice Eiseman acerca del color Pantone 2018.

En la pared, papel pintado de Papelesdelos70.com con un fondo violeta.
¿Cómo usar este color Ultra Violet o ultravioleta?
Tengo que admitir que es un color que me gusta mucho. Tal y como dicen desde Pantone, me resulta espiritual, inspirador y me transmite paz. Pero para decoración no es un tono que use.
Creo que no encaja en todos los ambientes y que en exceso a mí me resulta un poco agobiante. Eso sí, en otras casas sí que me gusta.
Pantone habla de que es un color que al cantante Prince le gustaba y también a otros famosos incónicos como Jimmy Hendrix o David Bowie. Todos ellos eran rompedores, inconformistas y «contraculturales».

Cesta de lavanda artificial de Maisons du Monde
¿Qué más significa el Color Pantone 2018?
Lo que no se puede negar al Ultra Violet es su implicación mística. Según nos siguen diciendo desde la marca, en concreto desde el Instituto Pantone del color, que históricamente hay una cualidad mística y espiritual.
Ha sido asociado a la práctica del mindfulness y a aquellos que buscan refugio en un mundo sobresaturado de estímulos. Lo encontraremos en lugares de meditación y en los que se busque una luz de creatividad, relax e inspiración.
También es un color fresco, que evoca la primavera, y no hay que olvidar que flores como las violetas, las lilas, los pensamientos o las glicinas son muy populares, especialmente en jardines.

Foto de Pottery Barn que combina los almohadones violetas con colores arenas en otros cojines, sofá y la alfombra.
En la foto de arriba se han sabido combinar colores naturales en paredes y muebles con la madera y diferentes texturas. Los almohadones violetas se encargan de poner un punto de color, sin estridencias.
¿Otro color del año Pantone elegido anteriormente?
Me gustaría saber si a ti te guían o te fijas en estas elecciones de color y si, de alguna manera, los implementas en tu casa para estar un poquito a tono con las tendencias.
Isabel para Alromasar
13 diciembre, 2017A mi la verdad es que me gusta más para vestir que para decorar. Al ser rubia y muy blanca me va muy bien al rostro.
Para la casa prefiero utilizarlo en pequeñas dosis. Es un color muy potente que queda muy bien en pequeños detalles decorativos.
Besos.
Guadalupe Mejorado
13 diciembre, 2017Totalmente de acuerdo Isabel. Pequeños toques, como en la foto de los almohadones, es lo que yo prefiero también. Un abrazote.
Isabel
19 diciembre, 2017No es un color que me inspire mucho para decoración. Hubo un tiempo en que me encantaba. De hecho, tenía mucho protagonismo en la habitación de mi hija antes del cambio de look. Ahora me sigue gustando, pero es verdad que es un color que termina cansando si se utiliza en grandes dosis… es mucho más adecuado para dar toques de color, creo yo.
Me gusta mucho la imagen en la que está combinado con madera y tonos neutros.
Un post impecable, como siempre.
Todo mi cariño y un beso enorme, mi querida Guadalupe.
Guadalupe Mejorado
19 diciembre, 2017Gracias Isabel. Sí, es un color que puede cansar, estoy contigo en ese aspecto. Pero los tonos como el lavanda quedan muy bien, especialmente en el baño, ¿no te parece? Gracias por tu buena opinión, como siempre. Un abrazo fuerte.
Malores
21 diciembre, 2017Me encantan todos los lavandas, morados, violetas, en la decoración de casa con mesura. Un beso grande
Guadalupe Mejorado
23 diciembre, 2017Gracias Malores, pues sí. Parece que casi todas coincidimos en esa idea. Un abrazo fuerte!